Como prevenir el robo interno en mi negocio

Una de las cosas que más daña a las pymes es el robo interno o también llamado el «robo hormiga», esto ocurre en cualquier negocio, pero con mayor frecuencia en los negocios de mostrador. Lo que preferimos pensar es que esto no ocurre en nuestro comercio y que todos nuestros empleados son de confianza, sin embargo las estadísticas muestran un caso totalmente contrario. Los empleados llegan a robar 5.5 más de veces que los clientes o «shoplifters» ocasionales. Afortunadamente, existen formas de reducir estas pérdidas.

– Evita la contratación de personas con un historial dudoso.
Investigar un poco del pasado profesional del empleado, los motivos de renuncia o algún problema en específico por el que haya pasado; esto muchas veces habla por si mismo. Toma en cuenta que si contratas una persona con la intención de robar puede hacerse compañero de los otros empleados para sacar tus ganancias poco a poco.

– Mantén una vigilancia activa.
Instalar sistemas de seguridad es uno de los métodos más eficaces para evitar el robo hormiga. Es menos probable que las personas hurten inventario o efectivo si saben que las estas observando. Contrata un buen sistema e instala cámaras con buena definición en puntos específicos de tu local.

–Haz inventario.
En algunas tiendas al pagar en caja dice la siguiente leyenda: si no te entregan tu ticket, tu compra es gratis». Parece una promoción, pero su principal función es hacer que los cajeros registren la compra. De esta manera puedes tener más certeza al comparar tus cuentas de inventario con las ganancias.
Otra acción extra que puedes realizar para agilizar esto es capacitar a tus empleados sobre la manera correcta de realizar el inventario diario.

–Identifica que es lo que más roban.
El producto que sea más vulnerable ponlo cerca de la caja donde esté a la vista. Otra opción más sofisticada es instalar sensores en cada producto, puede ser un poco más costosa, pero más segura.

-No des ocasión a los hurtos.
Crea un ambiente con mucha luz y cero puntos ciegos. Trata que el acomodo de tu tienda y productos sea el más abierto para que todo este a simple vista.

– Estar siempre al pendiente de lo que pasa en tu negocio.
Visita tu negocio seguido, que sea sorpresa y siempre en distintos horarios.

– Hacer cortes de caja seguido.
Fija un monto en específico y dile al empleado que retire el dinero para ponerlo en una caja fuerte o lugar seguro.

¿Cómo saber si ya hay un empleado que está dañando a tu negocio? Pon atención a los siguientes indicios y si los observas, actúa inmediatamente:

– El empleado que trabaja turnos extra y casi nunca prefiere tomar sus días de descanso (para evitar que alguien se dé cuenta de sus movimientos)

-Si este empleado no llega a estar, la rutina cambia. (Algo inusual se presenta)

-El empleado que de la noche a la mañana comienza a comprar cosas extravagantes y costosas.

-El dinero desaparece muy rápido cuando llega a la caja registradora.

-El producto que se termina de manera rápida y sabes que esto generalmente no ocurre así.

-Cuando el empleado tiene una relación más cercana con algún proveedor.

Tal vez él puede estar haciendo tratos e interfiriendo con tus ganancias desde que el producto llega a tu establecimiento.

Estos casos son problemas legales, sin embargo, muchas personas prefieren solo despedir al empleado porque una denuncia puede costar más tiempo y hasta dinero del abogado. Como siempre lo mencionamos en otros artículos, la prevención es nuestra arma número uno. Cuando este tipo de casos se presente en tu negocio actúa de manera rápida y que los demás empleados se den cuenta de las acciones tomadas para que no se repita. Tu negocio es cosa seria y la protección de tu inversión también.